Los Juegos Olímpicos y sus momentos surrealistas
Los Juegos Olímpicos rebosan de instantes memorables, con atletas cumpliendo los sueños de toda una vida y otros que se grabarán en la historia. Un ejemplo es Kurt Angle, quien ganó la medalla de oro en lucha olímpica en Atlanta 1996 a pesar de tener el cuello roto. Son momentos históricos, y algunos… ¿surrealistas? Momentos graciosos e historias curiosas que han hecho que sus protagonistas se ganen un lugar en la memoria colectiva.
Eric Moussambani
Para Sídney 2000, el Comité Olímpico Internacional otorgó invitaciones especiales a las naciones menos desarrolladas, tal fue el caso de Guinea Ecuatorial, país de donde es Eric Moussambani.
El Comité Olímpico de Guinea Ecuatorial buscaba nadadores, por lo que hizo una convocatoria a la que solo se presentó Moussambani. Automáticamente se clasificó por ser el único en la prueba. Eric no sabía nadar, y lo había hecho pocas veces en su vida.
No tenía entrenador, dónde nadar o algo que le permitiera nadar; Eric entrenaba en una piscina de un hotel tres veces por semana de 5 a 6 de la mañana; la piscina del hotel poco o nada tiene que ver con una alberca olímpica.
Con 8 meses de entrenamiento Moussambani llegó a Sídney 2000. Fue un entrenador de Sudáfrica el que notó que el joven no sabía nada, se acercó a Eric y le dio unas breves clases, además le entregó un traje de baño.
El día de la competencia Eric competía con otros dos nadadores, de pura casualidad fueron descalificados por salir antes que Moussambani. No sólo terminó la carrera, sino que también logró el peor tiempo en los 100 metros, con 1 minuto y 52 segundos. Pero el aplauso y admiración de los presentes fue todo para Moussambani, quien sólo quería viajar fuera de su país.
Preservativos y camas de cartón
La entrega de preservativos en los Juegos Olímpicos no es una novedad, pues desde Seúl 1988 se tenía la preocupación de los contagios de SIDA. Pero al parecer, los atletas no se dan abasto con la cantidad de preservativos que se entregan. Al parecer se ponen “felices” luego de ganar una medalla.
En Tokio 2020 las habitaciones de la villa olímpica se llenaron de camas de cartón, ¿el motivo? limitar al máximo el contacto entre deportistas por el tema de la pandemia. Las camas no soportan a dos o más personas en movimiento.
Para París 2024 se pretenden repartir más de 300 mil preservativos y las camas de cartón han regresado a la villa olímpica, aunque esta vez las camas son más resistentes.
Un dedo por ir a las Olimpiadas
El atleta australiano Matthew Dawson, un estelar en la selección olímpica de hockey sobre césped, tomó la decisión de amputar parte de uno de sus dedos de la mano para poder competir en los Juegos Olímpicos de París 2024.
Una lesión le impedía competir, y si decidía recuperarse de manera natural, se perdería las olimpiadas. Así que tomó la decisión de amputarse un dedo, porque es más fácil recuperarse de esa operación que de la lesión real.
Sabemos que las historias de los Juegos Olímpicos se tratan de sacrificios, pero esto se fue al otro nivel.